Usted está aquí

¡Comenzaron las Clases!

El jueves 1º de marzo unos 360 niños y niñas de 1 a 5 años comenzaron el ciclo lectivo 2018.

Con la llegada del mes de marzo las calles de la ciudad comenzaron a poblarse de miles de niños y niñas con sus guardapolvos o uniformes, dispuestos a aprender y disfrutar junto a sus compañeros. Para muchos, es el comienzo de un camino de nuevos conocimientos, juegos y amistad. Sin embargo, muchos otros pequeños no cuentan con esta posibilidad. En el país, hacia 2014 más de medio millón de chicos de 3 y 4 años no lograban acceder al jardín, según un informe del Centro de Estudios de la Educación Argentina (CEA).

Carlos César Da Silva

Pero felizmente, para los 360 niños y niñas que asisten a las dos Escuelas Infantiles de la LBV se abre un mundo de oportunidades en un espacio que los contiene y contribuye a su desarrollo, con alimentación, actividades pedagógicas, recreativas, y principalmente, el afecto de todo el equipo educativo. Esto, sin duda, repercutirá en sus vidas. Los beneficios de la escolaridad inicial son muchos y no se sienten sólo en primer grado: en la secundaria, quienes hicieron más de un año de nivel inicial aprenden más y mejor que sus compañeros que, por distintos motivos, se quedaron en casa cuando tenían 3 o 4 años. Así se desprende de los resultados de la prueba internacional PISA (2014).

Carlos César Da Silva

Este año, en el CPI y Escuela Infantil San Francisco de Asís, de la LBV -Av. Independencia 2948 CABA- 150 niños/as de entre 1 y 3 años realizarán actividades artísticas, como talleres de expresión corporal, música  y narración, además de sellado y estampado con materiales reciclados. También podrán participar de talleres de cocina, juego y recreación, entre muchas otras propuestas. Paralelamente, en el CPI y Escuela Infantil Jesús -Bogotá 3940 CABA- unos 210 niños/as de entre 1 y 5 años disfrutarán de talleres de  circo, ciencias sociales y naturales, relajación “Yoga para Niños”, sensorialidad, arte, literatura, cocina, juegos cooperativos, danza, expresión corporal y psicomotricidad.

Carlos Cesar da Silva

Las dos Escuelas Infantiles y el Espacio Educativo Calle Colores, de la LBV, realizaron el cierre del Proyecto Pedagógico Institucional del 2017.

Los niños/as que asisten a ambos espacios educativos, en doble jornada, provienen de hogares que se encuentran en situación de vulnerabilidad social. Las escuelas son para las familias mucho más que el espacio de aprendizaje de sus hijos, pues además ofrecen contención y asesoramiento en las diversas problemáticas que enfrentan, y pueden asistir a talleres sobre temas como violencia, límites, alimentación, derechos humanos, entre otros. Es más, todas las actividades se desarrollan teniendo en cuenta a las familias. 

Este año el PEI (Proyecto Pedagógico Institucional) de las escuelas se orientará a cumplir con la premisa de multiplicar las propuestas educativas y sociales, en búsqueda de brindar la mayor cantidad de oportunidades en la jornada diaria, y a su vez, en la vida cotidiana de los niños/as. "Multiplicar lo propio; multiplicar en familia; y multiplicar en comunidad", son los tres ejes a través de los que se plasmará este proyecto. 

Pedagogía

Carlos César Da Silva

Alumnas de la Escuela Infantil San Francisco de Asís

Cabe destacar que en toda su red de enseñanza y programas socioeducativos, la LBV aplica una pedagogía propia creada por el educador José de Paiva Netto, Presidente de la Institución. Este sistema de enseñanza, en el cual el cerebro y el corazón trabajan juntos, considera al estudiante como un ser espíritu - biopsicosocial, pues trae consigo el registro de experiencias que contribuyen a su aprendizaje.

Este marco conceptual se adapta y varía de acuerdo a las edades de los alumnos, recibiendo la denominación de Pedagogía del Afecto para chicos de 0 a 10 diez años. En esta franja etaria se procura la unión de los sentimientos al desarrollo de la inteligencia, a fin de que el cariño esté presente en todos los ambientes de convivencia de los niños y niñas, inclusive el escolar. A partir de los 11 años, se aplica la Pedagogía del Ciudadano Ecuménico, en la que el alumno, la familia y los educadores son considerados como coautores del aprendizaje, dividiendo entre sí las responsabilidades y actuando de forma distinta en un proceso integrado.